Por: Antonio Huerta Gutiérrez

El segundo mexiquense en la lista de la “lucha contra la corrupción” que se impulsa desde el gobierno federal se llama Ernesto Nemer Álvarez, a quien, en su calidad de Subsecretario de Desarrollo Social, en los tiempo de Rosario Robles como titular de la extinta SEDESOL, se investiga por su presunta participación en la aplicación irregular de una cantidad aún no determinada de millones de pesos que, dicen, en realidad nunca llegaron a los más pobres de México porque se “invirtieron” en cuestiones proselitistas, sobre todo para apoyar campañas políticas priistas en entidades como Veracruz y Coahuila, entre otras. También revisan su “espectacular” paso por la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), donde hay radicada una denuncia interpuesta por propietarios de gasolineras de la zona norte del país, quienes aseguran que les cobraba por el “huachicol institucionalizado”. El proceso está en marcha, habrá que demostrar lo que hoy son líneas de investigación, pero, hasta donde se sabe, por quien luego fue presidente del PRI en el Estado de México pasaron muchas de las decisiones que tuvieron que ver con ese movimiento millonario. Veremos en qué termina el asunto.