Los líderes parlamentarios en la Cámara de Diputados aprobaron el acuerdo inicial en materia de austeridad que aplicará este 2017, y que contempla entre otras medidas, la cancelación del pago de telefonía celular y también, de la entrega de subvenciones extraordinarias, es decir, de los bonos que se reparten entre las fracciones parlamentarias y sus integrantes, comúnmente en fin de año y que han sido identificados como los “bonos navideños”.

Sin tocar su dieta ni los seguros de gastos médicos mayores ni los seguros de vida que se entregan al iniciar la Legislatura, los diputados solo determinaron que los distintos apoyos que reciben para la labor parlamentaria estarán sujetos a comprobación fiscal.

Cada mes, los diputados cobran una dieta de 73 mil 817 pesos, a la cual se suman “apoyos económicos” por concepto de “Asistencia Legislativa”, que equivale a 45 mil 786 pesos al mes; y una bolsa más para “Atención Ciudadana”, por 28 mil 772 pesos mensuales.

Al anunciar el plan inicial de recortes en San Lázaro, cuyo fin es responder a las demandas ciudadanas en medio de la crisis económica que vive el país y las protestas ciudadanas por el alza en las gasolinas, el presidente de la Junta de Coordinación Política, Francisco Martínez, indicó que los viajes internacionales se reducirán al mínimo y siempre se realizarán en clase económica.

Sin aclarar cuántos recursos se ahorrarán con esas seis medidas ni especificar bien a bien si los recursos en cuestión se regresarán a la Cámara para que se destinen a otros rubros o bien, regresarán a la Tesorería de la Federación, el diputado Martínez Neri indicó que muy probablemente, en los siguientes días continuará la ronda de recortes para disminuir el presupuesto en el recinto parlamentario.