Grupo Puntual / José Contreras Contreras
TOLUCA, México, 4 de Julio de 2018.- Más allá de los resultados electorales, de partidos políticos y de colores, ahora lo importante es procurar la unidad obrero-patronal para garantizar las fuentes laborales, evitar una eventual desaceleración de la inversión y el cierre de empresas, sostuvo Francisco García Romero, secretario general de la Unión Nacional Obrera.
El líder obrero sostuvo que los trabajadores mexicanos sufragaron con absoluta libertad, atrás quedaron los tiempos del corporativismo sindical, por lo que se respetó totalmente la libertad de elegir de cada uno de los miembros de la clase laboral.
“Lo importante no es quién ganó o quién perdió, sino evitar cualquier tipo de conflicto poselectoral que ponga en riesgo la paz laboral que caracteriza al Estado de México y al país en general, porque la planta productiva no puede afectarse por movimientos políticos”, postuló.
García Romero señaló que la voluntad de los ciudadanos ya se expresó en las urnas, lo cual merece todo el respeto de partidos políticos y autoridades electorales, y señaló que lo que menos conviene a los municipios, los estados y a la República Mexicana en general es que existan conflictos que pongan en riesgo la estabilidad nacional.
“Las fuentes laborales son muy sensibles, si hay paz social seguirá fluyendo la inversión, más allá del color del partido que ejerza el poder, pero si nos trenzamos en discusiones, en movilizaciones poselectorales, eso sí puede afectar a los trabajadores, y es lo que debemos evitar”, indicó.
Francisco García Romero señaló que lo mejor que puede ocurrir en México es un cambio de gobierno terso con el que los capitales se mantengan en el país, para que las fuentes laborales no se pongan en riesgos.
Señaló que la economía mexicana muestra signos de fortaleza, pues a pesar del proceso electoral no se registraron paros técnicos ni mucho menos cierres de empresas, lo cual debe mantenerse en beneficio de la clase trabajadora.
Deseó suerte a las autoridades electas y les recordó que independientemente del partido político al que pertenezcan deben procurar atender las demandas de los trabajadores, las cuales se centran en tres demandas: seguridad, transporte eficiente y el impulso de mejores condiciones laborales y salariales para quienes dependen de su empleo para satisfacer las necesidades de las familias mexicanas.
