El gobernador de Puebla, Antonio Gali, anunció hoy la llegada de 2 mil soldados para reforzar la presencia del Ejército en Puebla, con el fin de acabar con las bandas dedicadas al robo de combustibles.

El aumento de la presencia castrense se produce después de que cuatro soldados y seis civiles perdieran la vida el miércoles en un enfrentamiento con presuntos huachicoleros registrado en el poblado Palmarito.

Gali destacó la necesidad de capturar a los líderes de esas bandas y seguir con el diálogo «con las familias para que desistan de apoyar a los delincuentes». «Vamos a responder, a detener a estas bandas», sentenció tras recordar que ya fue detenido el segundo del grupo criminal Los Bukanas, que opera en Veracruz y después se metió en Puebla. Ahora el objetivo es Antonio Martínez, alias el Toñín y líder de otra banda, señaló el gobernador.

Gali acusó a los huachicoleros de la zona conocida como el Triángulo Rojo de haber «descompuesto el tejido social comprando a ciudadanos» para vigilar la zona cuando se realizan las tomas clandestinas.