El tradicional festejo por el 5 de mayo tendrá un concepto diferente este año, sin cobertura televisiva y sin el despliegue de figuras que lo caracterizó en administraciones anteriores
Dicho festejo fue incorporado por George W. Bush como uno de los eventos anuales de la residencia presidencial.

Luego de ser una tradición por 16 años, este año la festividad quedará reducida a un evento encabezado por el vicepresidente Mike Pence en el salón del Tratado Indio, ubicado en el viejo edificio ejecutivo adjunto a la Casa Blanca, utilizado para reuniones y recepciones y que en el pasado sirvió como biblioteca.

Funcionarios de la oficina de Pence señalaron
que no está en claro si el presidente Donald Trump atenderá esta festividad ya que está previsto que viaje a a Nueva York para reunirse con el Primer Ministro de Australia, Malcom Turbull.