Por: José Contreras Contreras

¿Y los sindicatos?

Junto con la derrota electoral priista del pasado 1 de julio de 2018 los sindicatos adheridos tradicionalmente a ese instituto político se vinieron abajo, lo cual no tendría por qué haber ocurrido, pues se supone que se trata de organizaciones humanas que muchas veces se dijeron independientes de partido, y que por lo tanto hoy tendrían que alzar la mano y seguir en la brega, luchando por las causas justas de sus afiliados. Lamentablemente no es así.

Los dirigentes sindicales tradicionales enmudecieron y han dado lugar al surgimiento de nuevas organizaciones sindicales muy apegadas a la nueva mayoría política que gobierna el país. Ahí está Jorge Neyra, quien proveniente de una central absolutamente priista como la Confederación de Trabajadores de México (CTM), ahora hace sus pininos como dirigente de una nueva cúpula que pretende conjuntar a todos esos trabajadores y empleados que alguna vez fueron hechos a un lado.

Sin embargo, el esfuerzo de Neyra quedó como llamarada de petate, fuerte, sí, escandalosa, también, pero no progresó en un esfuerzo sostenido que verdaderamente haya dado de qué hablar en los últimos meses, más cuando ha sido poco comunicado lo que supongo que estarán haciendo.

Alguien cercano al antes Secretario del Ayuntamiento priista de Metepec, ahora dirigente sindical de la Cuarta Transformación, me comentó extraoficialmente que Neyra sí está trabajando, que se dedica de tiempo completo a la conjunción de más organizaciones, incluso varias que de plano abandonaron al PRI y buscan nuevos destinos, pero mientras esto no se sepa oficialmente, pues la verdad es que no somos adivinos como para entender que se trató de un esfuerzo con miras a trascender.

Pero esa es la lucha que lleva a cabo Jorge Neyra, pero dónde están los otros líderes sindicales que antes hablaban tanto y daban también mucho de qué hablar. Ya no se les oye, ya no se les escucha, pareciera como que están debajo de una loza sepulcral de la que difícilmente saldrán, y menos aún si no levantan la mano.

¿Dónde quedaron los sindicatos que en otros tiempos fueron tan poderosos?

Lo malo es que en este trecho los únicos que pierden son los trabajadores adheridos a centrales tradicionales como la misma CTM, CTC, CROM o la Organización Nacional de Obreros. Sus líderes perdieron fuerza, pero ellos también. Sus dirigentes enmudecieron, pero con ellos también la voz de millones de trabajadores mexiquenses se apagó.

Son tiempos de rehacerse, no se pueden quedar en el pasado, no pueden auto-condenarse a la extinción, las centrales sindicales verdaderamente democráticas y comprometidas han dado muestra a nivel nacional de lo mucho que pueden lograr cuando se activan.

Basta con echar una ojeada a lo que hoy sucede en Venezuela y el papel protagónico que los sindicatos tienen en la revolución social que poco a poco se gesta en ese país y que tarde o temprano dará lugar a un cambio de régimen.

Hoy, ante un gobierno federal cada vez más centralizado, donde la figura de un solo hombre se consolida como la única opción de gobierno, es imprescindible que los sindicatos se reactiven, si son priistas, petistas, panistas, perredistas, eso en realidad no interesa, porque lo verdaderamente importante es el peso específico que como organizaciones humanas tienen y la fuerza que como movimientos de unidad pueden alcanzar.

Los sindicatos mexicanos, en particular los mexiquenses, deben despertar, le hacen mucha falta a este país, son contrapesos políticos importantes, más cuando los partidos políticos han dado un paso atrás y parece que se han dado paso al poder de un solo hombre.

Necesitamos de los sindicatos, nos urge la potencia social que éstos pueden alcanzar, no pueden permanecer callados y mucho menos sumisos ante decisiones que afectan directamente a sus agremiados. Por favor, levanten la cabeza.

No es cuestión de gusto…

El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México, Jorge Olvera García, les recordó ayer a los diputados de la LX Legislatura del Estado de México que no es cuestión de gusto aprobar o no la propuesta de legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo, pues la Suprema Corte de Justicia de la Nación ya falló en torno a ese tema, y, como máximo tribunal del país, es un asunto que causó jurisprudencia y por lo tanto debe proceder en todos los órganos legislativos del país.

Luego de que diputados del Movimiento de Regeneración Nacional, Verde Ecologista, Encuentro Social y Partido del Trabajo hicieron mutis el martes anterior para provocar se suspendiera una sesión de comisiones encabezada por la de Gobernación y Puntos Constitucionales, en la cual tendría que discutirse, analizarse y en su caso aprobarse los llamados matrimonios igualitarios, el titular de Derechos Humanos de la entidad les recordó a los legisladores que negarse a obedecer la resolución del máximo tribunal del país podría hacerlos caer en desacato, conducta legal que es motivo de sanción, la cual puede llegar a la destitución del cargo.

Jorge Olvera García, titular de Derechos Humanos, recuerda a diputados que no es cuestión de gusto, sino su obligación aprobar matrimonios igualitarios.

Bonito cuanto sería que esto ocurriera, pues de repente el Estado de México se quedaría con menos de la mitad de los 75 que integran la Legislatura local, lo que causaría un verdadero drama político, pues no recuerdo que la ley local prevea esa situación. ¿Qué se tendría qué hacer para remediar la ausencia de más de la mitad de los miembros del Poder Legislativo local?

Hasta el momento, cuando un diputado se ausenta por alguna causa que implique que ya no va a regresar a ese puesto, o simplemente que se mantendrá separado del mismo por un periodo considerable, lo primero es llamar a su suplente, lo cual nos causaría un conflicto quizá peor, porque si los titulares están como están, no quiero imaginar ni por un momento qué pasaría si tuviéramos que llenar las curules con los suplentes.

Sin embargo, legalmente sería lo procedente, pero para no imaginar escenarios catastrofistas, más valdría que los señores legisladores comprendan que no están a la buena de Dios ni mucho menos en una cuestión donde valga la pena su opinión personal. No, se trata de asuntos ya analizados desde hace mucho tiempo, y en el caso específico de la viabilidad de los matrimonios entre personas del mismo sexo, pues es una cuestión ya resuelta que simplemente se tiene que aprobar.

Así es que más les valdría a nuestros legisladores que se ciñan a la legalidad, no hay para donde hacerse, a reserva del tipo de “escenitas” como la del martes pasado, en la cual, para no comprometerse, fue más fácil hacerse de ladito y hacer el “vacío” para que la comisión legislativa se suspendiera.

Vamos a ver cuánto más aguanta el tema, qué más van a hacer o a inventar para no entrarle a un asunto tan serio, complicado sí, porque se entiende que el día que los diputados se amarren adecuadamente el cinturón y aprueben esa reforma legal al Código Civil del Estado de México, seguramente se llenará la Plaza de los Mártires de Toluca con viejitas o mochos de La Vela Perpetua que lo menos que harán serán cadenas de oración, si no es que hasta se cortan las venas ahí frente a la sede del Poder Legislativo.

Se entiende que algunos de esos diputados tienen compromisos directos con las iglesias, no solamente con la católica, como los del Partido Acción Nacional, o con la evangelista como los “pastorcitos” del Partido Encuentro Social, y saben que se les podría ir la “clientela” el día que se dejen de vaciladas y acaten la ley.

Así está el terreno, árido para algunos, porque es un hecho de que se trata de un asunto que romperá cartabones y dejará atrás una larga tradición de conservadurismo que ha caracterizado lamentablemente a gran parte de la población del Estado de México, y en particular de Toluca, donde todavía muchos se persignan antes de pecar, aunque pequen de todos modos.

Cada quien tendrá su opinión muy personal, yo tengo la propia, por supuesto, pero no se trata de querer o no querer, repito, es un asunto ya juzgado en la Suprema Corte de Justicia del país, y es un asunto de obvia resolución porque se tiene que proteger a un amplio sector de la población mexiquense, sí, amplio, porque aunque se quiera o no reconocer sí hay muchos, más de los que parece, que gustan de tener relaciones personales, afectivas y sexuales con otros del mismo sexo, y eso hay que respetarlo, nos guste o no nos guste.

Es mejor siempre contar con un marco legal adecuado, acorde a las necesidades de la sociedad contemporánea, que seguir actuando como liberales y comportarnos como conservadores. No hay que ser hipócritas.

¿Presiones?

Araceli Casasola Salazar, diputada local del Partido de la Revolución Democrática, confió ayer que ha recibido “ciertas presiones” de sus compañeros legisladores para “invitarla” a que retire la propuesta que hizo precisamente para aprobar reformas al Código Civil del Estado de México para oficializar los matrimonios entre personas del mismo sexo.

¡Qué peligroso! Acaso olvidarán esos diputados, los compañeros de Araceli Casasola, que precisamente ese fue el principio para crear la figura del fuero constitucional, pues nadie tiene derecho a ejercer presión alguna sobre un legislador o legisladora a efecto de hacerla cambiar de opinión sobre lo que dice o presenta en la máxima tribuna de representación de esta entidad.

La diputada Araceli Casasola Salazar, del PRD, denuncia «presiones» para retirar su propuesta de legalizar matrimonios igualitarios.

Aunque Araceli Casasola se negó a revelar los nombres de esos diputados que se han acercado a ella para “sugerir” que retire la propuesta de los llamados matrimonios igualitarios, no es difícil adivinar de qué colores son. Es obvio pensar que son de los mismos que se mantuvieron ausentes de la última sesión de comisiones donde debió tratarse ese tema.

Ahora sabemos, con precisión, que dentro del cuerpo cameral existen quienes no solamente piensan diferente, lo cual se vale y se respeta, pero que además se atreven a violentar el derecho constitucional del fuero, en el más estricto y legal de sus términos.

Valdría la pena profundizar en el asunto y so solamente lanzar la piedra a ver a quién le cae, sino dar nombre y apellido de quienes así actúan, pues eso ya va mucho más allá de una actitud retrógrada y conservadora, y roza en lo peligroso. Es solo un llamado de atención a tiempo, no vaya a ser que las cosas pasen de una “respetuosa sugerencia”.

¿Y la orden de aprehensión Apá?

Ya no sorprende todas las quejas y denuncias sobre hechos delictivos sin investigar en esta entidad, sobre todo si se toma en cuenta que alguien que tiene una orden de aprehensión vigente no solamente ande tan campante por la calle, sino que, en el colmo, cite a conferencia de prensa para hablar sobre el retiro de comerciantes ambulantes de la zona Terminal-Mercado Juárez de Toluca y del mercado Aviación-Autopan.

Esmeralda de Luna Sánchez, ¿no que la andaban buscando?

Si con esa eficacia actúa la Fiscalía de Justicia de esta entidad, a nadie debe sorprender por qué más del 80 por ciento de los delitos que se cometen quedan en la impunidad en este territorio mexiquense.

Ya ni siquiera es necesario huir para evadir la acción de la justicia, sino que ahora ya hasta se puede citar a conferencia de prensa en céntrico café-restaurante de la ciudad de Toluca para presentarse como si nada frente a los representantes de los medios de comunicación con la seguridad de que nada ni nadie va a impedir que se siga evadiendo la acción de la justicia.

¿Será que alguien ya negoció la supuesta orden de aprehensión que un juez emitió hace algunos meses y hay orden específica para que ésta no se ejecute?

Los hechos demuestran, una vez más, que la impunidad es la madre de todos los vicios que alientan la delincuencia y la criminalidad en esta entidad. Está claro que cualquiera, acompañado de un buen séquito de abogados, puede pasearse incluso frente a la comandancia de la policía ministerial mexiquense y pintarles un caracol, reírse e irse tan campante como se llegó.

Justicia hay, pero no para todos. Se ve.

Sin justicia, desigualdad y pobreza

Vale la pena en realidad analizar el discurso que pronunció el gobernador Alfredo del Mazo Maza ayer en la ceremonia del Consejo de la Judicatura de la entidad, en la cual rindió su cuarto informe de labores el titular del Poder Judicial, Sergio Medina Peñaloza.

“Mientras siga pendiente la justicia, persistirán la desigualdad y la pobreza”, advirtió Alfredo del Mazo.

Alfredo del Mazo Maza advierte que sin justicia nos condenaremos a la pobreza y desigualdad.

Y qué razón tiene el mandatario mexiquense, porque nada ni nadie logrará que la situación mejore para las mayorías si no somos capaces de garantizarles justicia. Pero justicia plena, oportuna, ágil, comprometida, no justicia tres años después de cometido un hecho ilícito.

¿De qué le sirve la justicia a alguien que como José Humbertus tiene tres años en prisión acusado de delitos que en este largo periodo no han sido probados? Qué no tendría que haber alguna ley que dijera precisamente que si en un plazo determinado el que acusa no es capaz de probar una imputación, pues el imputado tendría que ser liberado, y si acaso seguir el proceso, pero en libertad.

¿Sabe usted cuántos José Humbertus hay en las penitenciarías del Estado de México? Ahí está el otro caso, el de un profesor que se encuentra recluido en Almoloya de Juárez, acusado de homicidio. Lo extraño es que el que supuestamente “mató”, anda paseándose desde hace ocho años en una ciudad de los Estados Unidos de América.

En este último caso tiene más de ocho meses que se cita a audiencias para supuestamente escuchar a la parte acusadora, pero todas las audiencias e han suspendido porque precisamente quien supuestamente acusa al profesor de homicidio, que en este caso es el padre del supuesto “muerto”, no acude porque también tiene miedo que lo aprehendan y consignen, dado que cobró el seguro de vida del hijo, se volvió rico, y ahora ya se le “olvida” acudir al juicio que él comenzó.

¿No sería de eminente justicia garantizar a alguien que está acusado de cualquier tipo de delito un plazo máximo para estar a la espera de la “justicia”? Porque justicia que no es pronta y expedita, simplemente no es justicia.

Y así como los relatados, hay cientos de casos archivados en los juzgados del Estado de México de personas en espera de alguna resolución judicial a su favor, o en contra, pero no en la indefensión de los días, meses y años que pasan sin que alguien se presente a demostrarles de lo que los acusan.

Coincido con mi gobernador: “Mientras siga pendiente la justicia, persistirán la desigualdad y la pobreza”. No podemos permitir que eso siga ocurriendo, alguien tiene que hacer algo para acabar con ese flagelo que representan “los olvidados” de las cárceles mexiquenses. ¿Qué no serían más productivos en la calle, haciendo algo por este estado y este país, que seguir manteniéndolos en prisión?

La última y nos vamos…

Apenas comenzó este 2019 y ya casi se va a acabar. Por lo menos ya llegó la temporada de lluvias. ¿O no? Es evidente que el cambio climático nos alcanzó. ¡Lloviendo en febrero! Parece cosa de risa.

Si le hubiera dicho a mi abuelo que en febrero llovía, primero me hubiera volteado un revés en el hocico, y luego me hubiera dicho que era un bruto.

Llueve intensamente en febrero. ¿No que el cambio climático era fantasía? Señor Trump.

¡Qué bueno que ya no está entre nosotros sobre la faz de la tierra! Porque es cierto, llueve en febrero, no es broma, van dos días que esto ocurre al menos en la ciudad de Toluca, y lo peor es que, según algunos que sí saben de eso del ambiente, dicen que se convirtió en “lluvia ácida”, debido al nivel de contaminación que impera en la atmósfera que nos rodea.

Ahí está el cambio climático, ese que dice el presidente de los Estados Unidos de América, Donald Trump, que es “fantasía”. No, no es una broma, el clima está totalmente modificado y estamos pagando las consecuencias.

No hace falta ver videos en internet en los que los ositos polares sufren porque se están derritiendo los glaciares. No, no hay que ir tan lejos. Estas lluvias traerán consecuencias, en lo local.

Las autoridades han comunicado a nivel estatal y municipal que ya trabajan en el desazolve de ríos, canales, sistemas de drenaje, todos llenos de la basura que nos encargamos de arrojar a las calles todos los días. Pero, como se ve el asunto, no les va a dar tiempo de llevar a cabo esas acciones preventivas, y, evidentemente, habrá inundaciones.

Las lluvias ya comenzaron, en pleno febrero, y no tardan en agudizarse y serán noticia por los daños que causarán en nuestras comunidades. Lamentablemente no somos capaces de cambiar nuestros hábitos y mucho menos de ser menos puercos y dejar de arrojar la basura en todos lados, como si por arte de magia se fuera a desintegrar. ¿O no?