Visión Puntual

Por: José Contreras Contreras

Ganar, perdiendo

 

¿Cómo ganar en una elección que se ve perdida? Esa es la pregunta que se hacen cada vez más en la sede del Poder Ejecutivo mexiquense y en propio Partido Revolucionario Institucional del Estado de México, donde existe gran preocupación por lo que pasará el próximo 1 de julio en el Estado de México, pero también en el ámbito federal.

Es difícil pensar que las cosas cambien de rumbo de aquí al día de las elecciones, y me refiero básicamente a la elección presidencial, pues la tendencia electoral es clara a favor del de Macuspana, Tabasco, quien incluso ya se cree presidente, y si no, solo habría que verlo en su más reciente gira por el Estado de México.

Por cierto, en menos de una semana López Obrador estará nuevamente en suelo mexiquense, donde buscará no solo impulsar su campaña proselitista, sino, además, dar un empujón definitivo a los candidatos que su partido político, el Movimiento de Regeneración Nacional, registró como aspirantes a presidentes municipales y diputados locales.

El hecho, dicen, es que en los municipios mexiquenses parecía que las cosas estaban muy a su favor, pero de repente se desinflaron sus abanderados, unos por mala estrategia electoral y otros más porque están resintiendo la inconformidad que brotó en Morena después del proceso interno de selección de candidatos, el cual ha sido ampliamente cuestionado.

Pero por lo que respecta al Revolucionario Institucional. Éstos se han metido en una nueva tendencia, en la cual se asegura que lo mejor que le puede pasar al PRI mexiquense es perder.

¿Locura? Pues no lo es tanto, sobre todo si se toma en cuenta que la caída nacional del PRI podría representar para los mexiquenses en la mejor oportunidad de erigirse como los salvadores del mismo PRI.

¿Cómo? Pues es más o menos sencillo entenderlo. En el Estado de México el PRI tendría su mayor fortaleza, dado que seguiría siendo gobierno, con Alfredo del Mazo Maza a la cabeza, un hombre carismático, bien plantado y que comienza a cimentar un gobierno que podría alcanzarle para convertirse en el mejor ejemplo nacional de lo que hace ben el Revolucionario Institucional.

Desde el Estado de México se puede proyectar el renacimiento del Partido Revolucionario Institucional, con Alfredo del Mazo al frente, para construir los próximos tres años una candidatura fuerte a la Presidencia de la República, basada en una resistencia política de altura, frente a un gobierno que eventualmente encabezaría lo que se cree hoy que es la izquierda mexicana, abanderada por Andrés Manuel López Obrador.

El PRI, como oposición, también ya demostró que puede ser un buen partido político, y si no que le pregunten a Vicente Fox Quesada y a Felipe Calderón Hinojosa, quienes nunca tuvieron un enfrentamiento con el PRI, pero sí tuvieron en este instituto político al mejor contrapeso que incluso les ayudó a hacer algunas cosas buenas durante su administración.

Pensar en el PRI como oposición para el próximo gobierno es comprender que habría en este país una oposición “pensante”, no de confrontación, no de desgarrarse las vestiduras, sino de ideología, de ley, de pensamiento, de acción, que favorezca que López Obrador no se convierta en el “reyecito” que parece pretende ser.

Y en ese escenario político, el PRI necesita un auténtico líder, y qué mejor para ocupar esa posición que un político fuerte, joven, con capacidad operativa y experiencia suficiente para convertirse en el líder priista, no en el presidente nacional de ese instituto político, sino en la auténtica cabeza, de facto, de los priistas del país.

Sin Presidente de la República priista, Alfredo del Mazo sería el personaje más notable en la estructura nacional del Revolucionario Institucional, por lo que tendría que echarse a ese partido al hombro y enfrentar seis años de lucha desde la oposición, frente a un titular del Ejecutivo federal nada fácil, como López Obrador, a quien en realidad no se le dan mucho eso de los consensos, sino más bien es impositivo, imperativo, y de enfrentamiento.

Desde esa posición, Alfredo del Mazo Maza se convertiría también en el más probable candidato del Partido Revolucionario Institucional para recuperar la Presidencia de la República, seis años después, y créanme que tiene el tamaño y capacidades para hacerlo, más si se piensa en un Del Mazo Maza con seis años más de experiencia, forjado bajo fuego en un escenario como minoría política, y con la fortaleza que le brindaría el hacer bien las cosas en el Estado de México.

Esa es la forma en que el PRI mexiquense podría salir ganando de una derrota en el ámbito federal el próximo 1 de julio, pero para eso debe asegurar dos cosas importantes: no convertirse en minoría también a nivel estatal; es decir, conservar la mayoría en el Congreso del Estado de México y en 50 por ciento más una de las presidencias municipales mexiquenses.

De lograr ese objetivo, el PRI mexiquense podría arropar a su líder estatal, Alfredo del Mazo Maza, para convertirlo en el líder nacional que requerirá ese instituto político para verse una vez más como oposición a nivel federal.

No es lo óptimo, por supuesto. El Revolucionario Institucional quisiera seguramente que su candidato a la Presidencia de la República, el no priista José Antonio Meade ganara, pues de esa manera seguiría controlando en escenario político de este país, aunque esa meta se ve cada vez más lejana, a pesar de los esfuerzos que se han hecho en materia de “relanzamiento” de la campaña presidencial.

 

¿Empate en el segundo lugar?

 

Andrés Manuel López Obrador: «Meade ya alcanzó a Anaya»

Sorpresiva la declaración de Andrés Manuel López Obrador, en gira por Jilotepec, Estado de México, sobre el presunto “empate” que ya logró José Antonio Meade en el segundo lugar de la contienda presidencial frente a Ricardo Anaya Cortés.

López Obrador dijo que, según la última encuesta que llegó a su poder, elaborada por la empresa Saba, con sede en Monterrey, Nuevo León, el candidato de la coalición PRI-Verde-Nueva Alianza ya alcanzó a Ricardo Anaya, abanderado del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano.

Se supone que López Obrador tiene información “privilegiada”, que trabajan para él equipos completos, numerosos, en la elaboración y análisis de encuestas, pues él ha demostrado que confía demasiado en la estadística a la hora de la toma de decisiones.

Entonces, de ser cierto lo que él dijo tener en las manos, la batalla por la Presidencia de la República se pondría sumamente interesante en los últimos 30 días de la campaña presidencial.

Andrés Manuel López Obrador también explicó que Meade fue capaz de alcanzar a Anaya por el relanzamiento de su campaña que impulsó el cambio en la dirigencia nacional del PRI; es decir, que René Juárez Cisneros estaría cumpliendo el objetivo por el cual fue puesto en esa posición.

Si este empate es real, el PRI se convertirá en factor relevante en la contienda electoral. Quizá sea muy difícil que alcance siquiera a López Obrador, porque la ventaja es demasiada y el tiempo para hacerlo ya es muy corto, pero lo cierto es que con un PRI en segundo lugar las cosas ya no serían tan sencillas para el Movimiento de Regeneración Nacional.

Lo malo, en este sentido, es que un eventual empate en el segundo lugar, daría lugar a una judicialización del resultado de la elección presidencial, pues no crean que el PRI va a entregar con las manos cruzadas la Presidencia de la República.

Enrique Peña Nieto no es, ni por mucho, el hielo que fue Ernesto Zedillo Ponce de León cuando tuvo que reconocer el triunfo de Vicente Fox, por el contrario, Peña Nieto sí es un priista convencido, que aunque estadista y demócrata, a él sí le corre sangre tricolor por las venas y no solamente atole como a Ernesto Zedillo.

Con un PRI en segundo lugar, empatado o adelante el panista Ricardo Anaya, vendría una disputa real por la silla presidencial, en tribunales, con todos los recursos al alcance para evitar entregar la máxima posición política de este país, y en ese escenario Peña Nieto sacará las agallas, de eso pueden estar seguros.

 

Defensa turquesa…

 

Luis Castro a la defensa de los candidatos del PANAL

El presidente nacional del partido Nueva Alianza estuvo en Toluca para visitar a los magistrados del Tribunal Electoral del Estado de México (TEEM), ante quienes realizó una defensa puntual de las impugnaciones presentadas por algunos partidos políticos en contra de sus candidatos a presidentes municipales y diputados locales.

Luis Castro Obregón explicó, con manzanitas, a los magistrados del TEEM que ciertamente algunos de los candidatos propuestos por Nueva Alianza a cargos de representación popular están vinculados con el priismo mexiquense, pero eso tiene lógica si se toma en cuenta que el Revolucionario Institucional y PANAL fueron aliados electorales por lo menos en las últimas tres votaciones registradas en suelo mexiquense.

Algunos, como el caso del ex presidente municipal de Tultitlán, Marco Antonio Calzada Arroyo, quien llegó a esa responsabilidad como candidato del PRI, y que ahora busca repetir, pero impulsado por Nueva Alianza. En ese asunto el presidente nacional del PANAL presentó a los magistrados pruebas como la renuncia que Calzada Arroyo entregó al PRI cuando decidió cambiar de partido, y hasta un video de cuando la actual presidenta estatal del partido turquesa, Luis María Escobar Contreras, le dio la bienvenida en un acto público.

Así en todos los casos, por lo que se prevé que esta visita del presidente nacional de Nueva Alianza facilite la toma de decisiones de los magistrados, para que la resolución a ese caso se dicte con bases sólidas, con la certeza de que se cumple  o no se cumple la ley.

Lo cierto es que el “caprichito” de don Ernesto Nemer Álvarez, presidente estatal del Partido Revolucionario Institucional, y su sed de venganza política lo único que está provocando es que el proceso electoral se ensucie, se dirima primero en los tribunales y después en las urnas, lo que verdaderamente no conviene a nadie.

 

Las fantasías de Núñez Armas

 

Juan Carlos Núñez Armas, en calidad de coordinador de la campaña proselitista de Gerardo Pliego Santana, como aspirante a la presidencia municipal de Toluca, ha tenido que recurrir a las “ventajas” del mundo digital para inventar una realidad paralela en la que pretende que su abanderado se sienta cómodo, aunque él mismo sabe que las cosas no le favorecen.

Núñez Armas. Ni él se cree

Núñez Armas ahora utiliza el mundo del internet y las redes sociales para intentar hacer creer a propios y extraños que Gerardo Pliego va a la cabeza de las preferencias electorales en Toluca.

Para ello, Núñez Armas ya creó un supuesto periódico digital, un portal de internet, desde el cual suelta todo tipo de contenidos “informativos” para crear en el ambiente electoral favorable para su candidato.

Esto no es nuevo, se hacía siempre que las campañas proselitistas estaban cerca, solo que antes se hacía con tinta y papel, se creaba una empresa, un periódico, semanario o revista, para desde ahí correr el rumor de que tal o cual persona era muy bien visto por el potencial electorado, a fin de influir en éste y hacer que votaran por el personaje en mención.

Eso es lo que está haciendo el panista Juan Carlos Núñez Armas, pero en una versión digital, aprovechando las bondades de este medio informal de comunicación en el que, por cierto, no hay siquiera necesidad de la identificación plena y ni de gastar tanto en instalaciones, tinta y papel para producir un periódico.

Ahora esto se hace desde una pequeña nave industrial llena de computadoras, con unos 15 jóvenes becarios a los cuales, por cierto, ofreció pagarles “algo” si se logra el objetivo: que gane Gerardo Pliego santana la elección a la presidencia municipal de Toluca; en caso contrario, el único compromiso es liberarles el servicio social, vía sus empresas.

Por eso hoy corren a toda velocidad, por redes sociales como Twitter y Facebook, cientos de contenidos como supuestas encuestas, notas falsas relacionadas con las mismas encuestas, y hasta los llamados “memes”, para incidir en la población toluqueña, por aquellos que se dejan influenciar, que no tienen un voto definido, y que les da por apoyar siempre al que va “ganando”, para luego sentirse como “parte del triunfo”.

Lo malo es que al señor Núñez Armas y a su equipo de combate en internet les hace falta un poco de talento político y cibernético, además de que decía mi abuela que para hacer caldo de gallina lo primero que hace falta es tener gallina, por lo que para tener un candidato ganador primero habría que tener un buen candidato.

Gerardo Pliego Santana, el candidato que impulsa Juan Carlos Núñez Armas, si bien es cierto ya fue registrado por la coalición Por el Estado de México al Frente como aspirante a la presidencia municipal de Toluca, en realidad enfrenta graves problemas, comenzando en su propio partido político.

El Partido Acción Nacional no hizo un proceso de selección de candidato abierto, democrático, en el que los militantes pudieran proponer quién desean que los represente, así es que hoy Gerardo Pliego Santana podrá ser candidato de la coalición PAN-PRD-Movimiento Ciudadano, pero no es candidato de los panistas de Toluca, ellos no lo sienten suyo y no lo harán suyo.

Para que eventualmente “cuaje” la candidatura de Gerardo Pliego Santana se necesitaría que la estructura del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano trabaje para ese objetivo, lo malo es que en esa coalición el único partido que cuenta con cierta estructura es el Partido de la Revolución Democrática, pues el Partido Acción Nacional se quedó con muy pocos militantes comprometidos en Toluca, pues una parte prefirió ir detrás de Juan Rodolfo Sánchez Gómez a Morena, y el resto simplemente están enojados por la imposición del candidato, no lo hacen suyo, y por lo tanto no lo promoverán, ni al interior de sus familias.,

Ya del Movimiento Ciudadano en Toluca ni hablamos, porque los pocos militantes que tenía ese partidito están con Abraham Águila Abiud, apoyando a Andrés Manuel López Obrador y a todos los candidatos del Movimiento de Regeneración Nacional. Lo único que queda del Movimiento Naranja en la capital mexiquense es la oficina del Comité Estatal, un puñado de empleados, su dirigente en el Estado de México, y los recursos que cobran del Instituto Electoral del Estado de México, vía prerrogativas. Los militantes, los que ganaban las calles hasta vestidos de payasos, esos ya están en otro proyecto político.

Eso es lo que no dice el señor Juan Carlos Núñez Armas a su candidato Gerardo Pliego Santana, ni al equipo que mueve sus Fake News en internet. Eso es lo que debería valorar antes de hacer “ganador” a alguien que podría quedar incluso detrás de partidos políticos más pequeños pero que sí trabajan con los pies en la tierra, como Vía Radical, que podría darles un buen susto en la contienda por la presidencia municipal de Toluca.

 

La última y nos vamos…

 

Zamora Morales no pierde el tiempo y consolida alianzas

Mientras Gerardo Pliego Santana trata de convencerse a sí mismo de que puede ganar, mientras que Juan Rodolfo Sánchez Gómez simplemente desaparece del mapa competitivo porque no ha tenido buena recepción entre los mismos militantes de Morena, pues el único que avanza con pasos firmes en el camino hacia la presidencia municipal de Toluca es el actual alcalde Fernando Zamora Morales, quien aspira a la elección consecutiva.

Zamora Morales está haciendo lo correcto, muy al estilo de los presidentes de Estados Unidos de América cuando buscan la reelección, que allá si se le llama como en realidad es. Por un lado, fortalece su trabajo como autoridad en funciones, sobre todo en materia de seguridad como el programa de policía de proximidad que está dando buenos resultados, con la compra de más de 100 patrullas con lo que los ciudadanos de la capital mexiquense se sintieron mucho más seguros, y con acciones de bacheo y rehabilitaciones de calles que tanto agradecen los vecinos.

En tanto, en materia electoral, Zamora Morales aprovecha cualquier oportunidad para reunirse con los auténticos liderazgos de Toluca para confirmar y fortalecer alianzas, establecer nuevos acuerdos y proyectos, y trabajar conjuntamente en lo que sigue.

Así se ganan las elecciones, desde las bases, con las estructuras operando, no lanzando “noticias” falsas en internet. El triunfo se construye en las calles, en las comunidades, sobre todo en las más necesitadas, que es donde mejor posicionado está Fernando Zamora. Se trata de política, no de fantasías animadas. ¿O no?

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