Por: Antonio Huerta Gutiérrez

En un intento desesperado por incidir en la decisión de los magistrados que hoy votan para elegir al nuevo Presidente del Poder Judicial, el saliente, Sergio Javier Medina Peñaloza, autorizó y otorgó a cada magistrado un jugosísimo bono de fin de año de 250 mil pesos. ¡Un cuarto de millón de pesos a cada magistrado! Así de feliz fue la Navidad, Fin de Año y Día de Reyes de los responsables de impartir la ley en territorio mexiquense, lo que por supuesto dejó para mejor ocasión todo el sentido de austeridad republicana que impulsa denodadamente el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Son los “beneficios” de la autonomía del Poder Judicial que a capa y espada defendió  Medina Peñaloza, pasándose por el arco del triunfo cualquier recomendación, exhorto u orden de los diputados mexiquenses. ¡Qué descaro!