Desde la academia

Diana Elisa González.

Christian Karel Salgado.

Sin delito cometido, sin sentencia alguna, hay niñas y niños condenados a vivir su primera infancia en la cárcel o quienes deben unir sus recuerdos de infancia a estos espacios.

Mientras usted lee estas líneas, hay infantes cuya mirada se limita a una celda y su vida se enfrenta, tras las rejas, a las vicisitudes de la prisión.

La ironía es mayor en la conmemoración del día de hoy, pues se promueve reafirmar los derechos de las niñas y los niños, así como tomar consciencia de la construcción de una infancia feliz y protegida en sus derechos como parte de un desarrollo pleno e integral para el ser humano.

En México, el Día del Niño fue una propuesta del Presidente Álvaro Obregón y su Ministro de Educación Pública el Licenciado José Vasconcelos en 1924. «Hay que hacer de cada escuela un palacio con alma”, decía José Vasconcelos.

Hoy, para muchas niñas y niños el palacio es la cárcel, o en el caso de muchas niñas, niños y adolescentes que viven fuera pero con quienes se ejerce la crianza desde las prisiones, la realidad puede ser aún peor, pues pueden no tener ni ese techo, ni esa comida y pueden estar expuestos a una serie de violencias diversas ante la desprotección institucional.

Ante ello, es urgente reflexionar en la realización de acciones preventivas y de atención a la vulneración de sus derechos humanos, y proyectos incidentes a la protección de los mismos.

En agosto del 2021, comenzaron los trabajos de manera informal de la Cátedra de Investigación “Infancias con referentes de Crianza en Prisión, Infancia es Destino”, derivada de una iniciativa entre el Poder Judicial del Estado y la UAEMex, una idea que planteó imaginar escenarios de vida mejores para las infancias que tienen de alguna manera un vínculo con el sistema judicial y penitenciario.

Un año después, en mayo del 2022, iniciaron los trabajos desde las categorías de estudio: la situación de niñas, niños que viven adentro; y niñas, niños y adolescentes que viven afuera de las prisiones; la experiencia de maternidad o paternidad; y la observación de los centros penitenciarios como escenarios de crianza.

Y así empezaron las sesiones de diálogo con áreas de gobierno incidentes, asociaciones civiles y 12 equipos de investigación de disciplinas diversas.

Una de las problemáticas detectadas es la invisibilidad de estas infancias y la ausencia de datos específicos en el tema. Por ello es que, este 30 de abril se lleva a cabo la presentación del libro «Maternidades e infancias con referentes de crianza en prisiones del Estado de México. Diagnóstico estadístico», el escenario será la Facultad de Derecho en Ciudad Universitaria a las 15:00 horas.

A cada paso dado, la Cátedra se fortalece y entiende su razón: la importancia de entender para atender las problemáticas desde lo complejo y fortalecer un trabajo en equipo intersectorial, interinstitucional y multidisciplinar a favor de los derechos de estas infancias. Anécdotas en el camino hay muchas y dificultades también.

Pero es grato reconocer que la investigación es capaz de hacer un aporte valioso a las temáticas sociales y que entendernos como un engranaje, podría marcar una diferencia.

No podemos omitir el agradecimiento de aliados que desde su área gubernamental y desde las asociaciones civiles han reconocido la importancia de observar la temática, y se han sumado.

El sueño de los primeros bocetajes en el tema sigue vigente, y con responsabilidad y visión en el tema, sigue caminando.

Es crucial reconocer y proteger los derechos de las niñas y niños que nacen y viven la crianza desde contextos carcelarios, pues enfrentan desafíos únicos que deben convocarnos a la participación.

La infancia debe ser una página en blanco y la vez de colores con responsables trazos. La frase “infancia es destino” ha sido motivo de nuestras discusiones.

Hoy, las autoras la enfocamos así: la protección a los derechos humanos de las infancias y toda incidencia positiva en esta etapa de vida, es escritura necesaria en tiempo presente, porque queremos que impacte en su desarrollo actual y por supuesto, en los adultos que serán en el futuro.

Esta columna que tiene en sus manos, pone ante usted la posibilidad de diálogo desde las múltiples voces que participamos en la Cátedra de investigación infancias con referentes de crianza en prisión, infancia es destino; ojalá que en estas escrituras que compartiremos, encuentre una sugerencia de trasfondo: un mejor mundo, un mejor mundo para niñas, niños y adolescentes es responsabilidad de todos y todas, desde cualquier trinchera, desde cualquier sitio y en tiempo presente.

Aquí nos leemos.

Deja un comentario

Nombre y Correo obligatorios (Tu correo electrónico no será visible).