SE TRATA DE QUEMAS AGRÍCOLAS, VANDALISMO O CON FINES DE ESTABLECER DESARROLLOS INMOBILIARIOS

SAÚL URIEL

En el Estado de México más de 650 incendios forestales han devastado miles de hectáreas de bosques de coníferas y encinos, sin embargo, gran parte de ellos son provocados por quemas agrícolas que salen de control y quema deliberada con fines de inmobiliarios o por vandalismo.

El 18 de marzo en el municipio de Jilotzingo y Atizapán de Zaragoza se registraron incendios múltiples, los cuales en el primer caso las autoridades locales evidenciaron que fueron causados de manera deliberada.

Las autoridades locales de Jilotzingo reportaron 7 incendios simultáneos, encontrando evidencia de que habían sido provocados, ya que cuando ya sofocaban algunos en otras zonas como en los Bienes Comunales de Santa María Mazatla, se generaban otros en sitios diferentes. Desde luego se documentó e iniciaron la denuncia por daños ambientales.

En Valle de Bravo desde la noche del domingo y lunes por la mañana se extendieron tres incendios, la noche de ese día las autoridades locales señalaron que ya estaban sofocados, pero el lunes casualmente se expandieron a tal grado de tornarse incontrolables.

A este respecto y luego de denunciar que habían sido provocados los incendios en Valle de Bravo, la candidata de Morena Michelle Núñez pidió a sus detractores no usar ese tema de los incendios para sacar ventajas políticas. Ella por su parte decidió suspender sus actos de campaña y sumarse a las brigadas de apoyo para sofocar los incendios en El Cerrillo, Velo de Novia y Cualtenco.

De acuerdo con Probosque están controlados tres de los cinco incendios forestales registrados en el municipio de Valle de Bravo; y dos permanecen en combate. Los tres incendios bajo control son: El Cerrillo, Velo de Novia y Cualtenco, con un avance del 85, 80 y 70 por ciento de liquidación, respectivamente.