- La evidente quiebra financiera de municipios como Toluca, Naucalpan y Tlalnepantla fue ignorada por el OSFEM
Grupo Puntual / José Contreras Contreras
TOLUCA, México, 31 de Enero de 2022.- A pesar de los evidentes problemas financieros con los que cerraron las pasadas administraciones municipales, los ex alcaldes emanados del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) de los municipios más grandes e importantes del Estado de México fueron prácticamente “indultados” por el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM), que encabeza la ex diputada de Morena, Miroslava Carrillo Martínez.
El Informe de Resultados de las Cuentas Públicas Estatal y Municipales del Ejercicio Fiscal 2020 omitió revisar la aplicación de recursos financieros en los ayuntamientos de Toluca, Naucalpan, Tlalnepantla, Ecatepec, Coacalco, Texcoco, Tejupilco y Tultitlán, todos gobernados en ese año por militantes del Movimiento de Regeneración Nacional.
Ex presidentes municipales como Juan Rodolfo Sánchez Gómez, de Toluca; Patricia Durán Reveles, de Naucalpan; Raciel Pérez Cruz, de Tlalnepantla; Darwin Eslava Gamiño, de Coacalco, y Sandra Luz Falcón, de Texcoco, no fueron revisados por el órgano de fiscalización del Poder Legislativo del Estado de México, por lo que su actuación –positiva o negativa—no tendrá consecuencia alguna.
El pasado mes de diciembre de 2021 empleados municipales de Toluca, Naucalpan, Tlalnepantla y Ecatepec protagonizaron diversas movilizaciones para hacer público que sus respectivos presidentes municipales no cumplieron con obligaciones básicas como el pago de salarios, primas vacacionales, aguinaldos y otras prestaciones laborales a las que tenían derecho.
Los nuevos presidentes municipales de Toluca, Naucalpan y Tlalnepantla, entre otros, han dado a conocer que recibieron las administraciones con graves problemas financieros y que en las primeras revisiones han detectado irregularidades en la aplicación de los recursos públicos municipales; sin embargo, el OSFEM prefirió dejarlos fuera de las auditorías que pudieron aclarar qué es lo que sucedió en esas administraciones.
Las auditorías únicamente se aplicaron en 32 de loas 125 municipios del Estado de México, con lo cual se quedaron fuera las administraciones que mayores recursos disponen, lo que fue considerado por legisladores del PAN, PRI y PRD como un “sesgo político” que mancha la imparcialidad a la que está obligado en máximo órgano de fiscalización de la entidad.