ESTE MARTES SE REGISTRARÁ LA ELECCIÓN PRESIDENCIAL MÁS CERRADA DE LA HISTORIA DE ESTADOS UNIDOS
JUAN VÁZQUEZ

La llamada “guerra de los sexos” se ha convertido en un tema clave en la elección presidencial de Estados Unidos este año, polarizando a los votantes y encendiendo el debate sobre los derechos de género.
Las tensiones entre hombres y mujeres han tomado un papel central en los discursos de los candidatos, con temas como la igualdad salarial, los derechos reproductivos y el acoso sexual en el centro del debate.
Ambos candidatos, Kamala Harris y Donald Trump, han intentado ganar el apoyo de las mujeres, quienes representan una gran parte del electorado.
Sin embargo, sus enfoques han sido notablemente diferentes. Uno de ellos ha propuesto políticas enfocadas en la igualdad de género y ha prometido hacer cambios significativos en áreas como la licencia parental y el acceso a la atención médica. El otro candidato, en cambio, ha apelado a temas más conservadores, promoviendo una visión tradicional de la familia y restando importancia a algunas de las demandas feministas.
La participación masculina en esta elección también es crucial, y muchos analistas apuntan a que los hombres, especialmente los de zonas rurales y urbanas con baja escolaridad, podrían inclinar la balanza. La narrativa de “guerra de los sexos” ha reforzado esta división, y es probable que los resultados reflejen marcadas diferencias en la forma en que hombres y mujeres han percibido las propuestas de los candidatos.
En cuanto al impacto en la política, esta elección podría definir el rumbo del país en temas de igualdad de género durante los próximos años. Si el candidato que defiende los derechos de las mujeres gana, se espera un avance en reformas sociales. Si el otro candidato resulta electo, es probable que el país experimente un retroceso en ciertas políticas progresistas, en aras de reforzar una visión conservadora de la sociedad.
Con una diferencia de solo puntos porcentuales entre los candidatos, esta elección es una de las más reñidas en la historia de Estados Unidos. Este martes se decidirá si la “guerra de los sexos” impulsa un cambio social significativo o si reafirma valores tradicionales en la sociedad estadounidense.
