Grupo Puntual / Martha Romero
TOLUCA, México, 9 de Febrero de 2022.- La pérdida de casi dos años de clases presenciales no sólo incrementó la desigualdad educativa, también profundizo en aspectos como los bajos porcentajes de capacidad lectora de 51 por ciento que había antes de la pandemia por SARS-CoV2 hasta niveles de 70 por ciento entre los alumnos, afirmó María Luisa Flores del Valle, presidenta de las instituciones particulares agrupadas en la Alianza para la Educación Superior (ALPES).
Consideró que es necesario y urgente volver a clases presenciales porque las condiciones de la educación a distancia, a pesar de haberse convertido en parte de la vida diaria, aún carece de la materia y elementos tecnológicos para reflejar la calidad requerida para una enseñanza de alto nivel, por lo que llamó al Gobierno federal a generar condiciones adecuadas para volver sin riesgo a las aulas.
“Ante la disminución de la calidad en las condiciones de la enseñanza por un panorama de confinamiento como el actual, ha detenido a las instituciones particulares para abrir sus puertas, pues busca las mejores condiciones de sanidad no sólo para los jóvenes que acuden a nuestros planteles, sino también para el personal que labora en nuestras instituciones”, sostuvo.
Flores del Valle resaltó que se requiere toda la certeza por parte del Gobierno federal y de la Secretaría de Educación Pública (SEP), de que sí los alumnos regresan a clases presenciales no habrá consecuencias posteriores, ya que desde hace poco más de un año han realizado continuos llamados a las autoridades para trazar una ruta estratégica hacia la reapertura, donde se incluya la enseñanza híbrida y las competencias blandas.
Indicó que durante esta etapa de confinamiento, la carencia de los padres de familia por otorgar a todos sus hijos las herramientas tecnológicas suficientes y necesarias como computadoras, teléfonos móviles, hardware y software, ha impedido que la calidad del aprendizaje se mantenga o supere.
“Aunado a esto, el estrés tanto de los alumnos como de los mentores, provocado por la entrada de lleno a un mundo digital poco o medianamente conocido, ha propiciado una deserción escolar de un número enorme de alumnos, que en la educación que se imparte en las instituciones particulares puede llegar a niveles cercanos al 40 por ciento en el país”, añadió.
Finalmente, mencionó que la agrupación cuenta con 150 instituciones particulares de educación superior afiliadas, que atendían la formación profesional de 470 mil estudiantes en 680 campus antes de la pandemia, por lo que la educación híbrida debe ser contemplada como un actor más en la enseñanza, sin embargo, aún es imposible dejar el formato presencial porque se pone en riesgo la riqueza de aprendizaje para las futuras generaciones.
