- Grupo de encapuchados, en su mayoría mujeres, intentó intervenir en asamblea estudiantil y fue rechazado
Grupo Puntual / José Contreras Contreras
TOLUCA, México, 4 de Marzo de 2020.- La comunidad estudiantil de la Facultad de Derecho dio un rotundo ¡no! al paro de labores y expulsó a un grupo de encapuchados que intentaron interferir en las decisiones de ese espacio académico y luego apoderarse del edificio.
A gritos de “¡Fuera! ¡Fuera! ¡Fuera!, los estudiantes de Derecho exigieron que los encapuchados –en su mayoría mujeres—se retiraran de esa Facultad para evitar cualquier intento de intervención de personas externas al plantel.
Los estudiantes realizaron una asamblea informativa en el auditorio de la Facultad de Derecho, en la cual revisaron la evolución y la atención que las autoridades universitarias han dado a las denuncias de acoso y hostigamiento de profesores a los alumnos en diferentes planteles de la Escuela Preparatoria y facultades de la Universidad Autónoma del Estado de México.
Luego se hizo una consulta respecto a la posibilidad de recurrir al paro como mecanismo de presión para “empujar” acciones rápidas y contundentes en contra de los presuntos acosadores, y de forma mayoritaria se votó a favor de seguir trabajando sin claudicar a la batalla emprendida por las alumnas y alumnas en contra de ese tipo de abusos.
“No al paro” “No al paro”, se escuchó en el auditorio, a lo que siguió un sonoro aplauso.
Fue en ese momento que el grupo de encapuchados ingresó al auditorio, y la reacción casi unánime fue el “¡Fuera! ¡Fuera! ¡Fuera! Pues hubo coincidencia en que no es con rostros cubiertos y en el anonimato como e debe enfrentar la lucha en contra del hostigamiento sexual y los abusos de profesores.
“¡Aquí damos la cara!” “¡Con credencial en la mano!” “¡No necesitamos que vengan de fuera a decirnos qué hacer!” Les gritaron, y les exigieron que si querían participar en la asamblea estudiantil se descubrieran los rostros, se identificaran con credencial vigente o tira de material del actual semestre, y que respetaran el orden con el que se llevaba a cabo el encuentro.
Como los esbozados se negaron a descubrirse y tampoco se identificaron como alumnos de la Facultad de Derecho, y tampoco acataron la instrucción de que abandonaran el auditorio, los estudiantes decidieron dar por terminada la asamblea, pues finalmente las decisiones ya estaban tomadas, y para evitar cualquier tipo de enfrentamiento se salieron y dejaron solos a los de los rostros cubiertos.
Los encapuchados al ver que no tuvieron respaldo de la comunidad estudiantil de la Facultad de Derecho, abandonaron también el auditorio y se concentraron después en uno de los jardines, estuvieron hablando unos minutos y luego abandonaron las instalaciones de la Facultad de Derecho. Las autoridades de la Facultad de Derecho decidieron suspender las actividades, al filo de las 13:30 horas, para cerrar las instalaciones y evitar otro posible intento de “toma” por parte de personas externas a la institución, lo que generó algunas protestas de los alumnos, pues éstos insistían en que lo que desean es seguir estudiando y no suspender clases por este tipo de intentos de intervención.