El expredicador Fethullah Gülen, acusado por Turquía de haber instigado el golpe abortado de mediados de julio y que vive exiliado en Estados Unidos, aseguró este viernes en una entrevista con un canal alemán que regresaría a Turquía si Washington lo expulsa, como pide Ankara.
«Si Estados Unidos dice ‘sí’, entonces iré, no pasa nada. Terminaré mis días atormentado por ellos el gobierno turco y me presentaré ante Dios como un hombre puro», así lo declaró Gülen.
Ankara exigió de Washington la extradición de Gülen y envió a las autoridades estadounidenses documentos que prueban, según ella, su implicación en el golpe abortado.
El pasado martes, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, reclamó en la Asamblea General de la ONU una acción internacional contra el expredicador.
El gobierno turco acusa al expredicador de ser el cerebro del golpe fallido del 15 de julio.
Fethullah Gülen, exiliado en Estados Unidos desde 1999, rechazó una vez más lo que califica de «puras afirmaciones».
Una «organización internacional» debe investigar estas acusaciones, dijo a ZDF. «Si confirma las sospechas, entonces aceptaré lo que pida», afirmó. «Pero no llegarán a encontrar algo sólido», agregó.
«Todo esto es únicamente el fruto de la paranoia» del presidente islamista conservador turco, Erdogan, que fue «envenenado por el poder», denunció.