• Especialistas advierten que la vacunación contra COVT-19 no se hace de manera igualitaria y ahonda la injusticia social

Grupo Puntual / José Contreras Contreras

TOLUCA, México, 11 de Junio de 2021.- La fuerza social se fortalecerá después de la pandemia, aseguró Ricardo Mauricio Freire Soares, Doctor en Derecho Público y Maestro en Derecho Privado por la Universidad Federal de Bahía, al participar en la Mesa “América, Actualidad de los Derechos Humanos en Perspectiva Comparada”, del Cuarto Congreso Internacional de Derechos Humanos, “A una Década de la Reforma Constitucional de 2011”, que alberga la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México.

Freire Soares se pronunció a favor de un Nuevo Estado Social Solidario que proteja a los grupos sociales más vulnerables de la sociedad. “La crisis sanitaria impone una nueva ética humana, una ética de cuidad, una ética de austeridad, de solidaridad, sin la cual no superaremos esta crisis”, advirtió.

Señaló que, en medio de la pandemia de COVID-19, “a vacunación en el mundo no se hace de manera igualitaria, especialmente en los países más pobres terminan por no tener acceso a la vacuna, y en el ámbito interno también en cada uno de los estados, también percibimos esa desigualdad”, indicó.

Señaló que la vacunación anti COVID-19 es en estos momentos el mejor ejemplo de desigualdad, y la propia enfermedad no afecta por igual a la humanidad. “Sabemos que la crisis sanitaria afecta sobre todo a los sectores y grupos más vulnerables y a los sujetos también más vulnerables; la pandemia afecta sobre todo a los trabajadores, a los custodios, al personal de salud que se encuentra en riesgo, a las personas con VIH y que no tienen acceso a los sistemas de salud y sistemas digitales·, dijo.

Apuntó que la pandemia ha acentuado los problemas y las diferencias sociales, por lo que es importante la construcción de un Estado Solidario internamente, un estado solidario que pueda construir el constitucionalismo social.

Explicó que ese Estado Solidario inicialmente debe dedicarse a la mejora de la salud pública, el respeto al medio ambiente, implementar políticas de asistencia social, protección a los trabajadores, protección a pequeñas y mini empresas-

“Es muy importante que también la solidaridad ocurra entre los entes gubernamentales; en un estado federal como Brasil es muy importante la correlación entre los gobiernos federal y estatales. Infelizmente ese diálogo no se ha desarrollado”, aclaró.

Finalmente, destacó la necesidad de ahondar en el derecho a la educación. “La importancia del conocimiento se hace perdurable o incontestable; solamente el conocimiento mostrará el conocimiento científico para superar esta crisis, como las vacunas”, estableció.

El especialista brasileño afirmó que también el conocimiento permitirá el conocimiento de las instituciones, de los estados y de los organismos internacionales; “una educación que debe ser fundada privilegiando los derechos humanos, contribuyendo así a esa cultura de respeto a la dignidad humana”.

Por su parte, Ricardo Zuluaga Gil, abogado de la Universidad de Medellín, Colombia, y especialista en Derecho Administrativo de la Universidad Pontificia Bolivariana de Medellín, Colombia, se pronunció por una revisión profunda de los derechos humanos, bajo una perspectiva alejada del principio cristiano de que el hombre es la máxima especie y que está por encima de cualquier otra.

Advirtió que si se desea frenar la destrucción ambiental a la que el hombre ha sometido a la naturaleza, es necesario replantear la relación de la humanidad con el entorno. Habló sobre esta profunda arrogancia del ser humano que es capaz de sacrificar sus derechos a cambio de salvaguardarse a sí mismo, pero en cambio enfrenta procesos de extinción de especies y de reforestación de bosques del mundo.

Señaló que el discurso de los derechos humanos actualmente padece una profunda contaminación del discurso cristiano; “el discurso de los derechos humanos hoy se construye en buena medida a partir de la concepción cristiana del hombre, donde el hombre es un ser superior”, insistió.

Recordó que existen otras corrientes de pensamiento como el Jainismo, donde se indica que toda especie viva tiene la misma importancia, merece el mismo respeto y la misma atención.