Han pasado 21 años desde que la familia de Selena Quintanilla pudo verla a los ojos. Pero el miércoles por la tarde esto cambió cuando el museo Madame Tussauds Hollywood develó la esperada figura de cera de la difunta cantante.
Sus padres, Abraham y Marcella Quintanilla, sus hermanos A.B. y Suzette y su viudo, Chris Pérez, estuvieron todos presentes. Miles de admiradores llegaron de todas partes de Estados Unidos con la esperanza de quedar entre las 300 primeras personas a las que se les permitió ver la estatua.
La figura de cera llevaba puesto un traje negro con morado que Selena usó durante un concierto grabado para el álbum «Selena Live!», laureado con un Grammy en 1994.
La estatua, que tuvo un costo aproximado de 350 mil dólares, mantiene las voluptuosas curvas de la intérprete the «Bidi Bidi Bom Bom».