En el arranque de la semana, la coyuntura internacional favorece para que los participantes en el mercado cambiario nacional aumenten moderadamente sus posiciones en pesos.

Bloomberg publica que el dólar interbancario opera en 18.89 unidades a las 8:30 horas tiempo de la Ciudad de México, situación que implica para el peso un avance de 0.61 por ciento, mientras tanto en ventanilla bancaria el dólar se vende en 19.25 unidades, por debajo de los 19.30 reportado el pasado viernes por Citibanamex.

La  moneda mexicana arranca la semana con el ‘pie derecho’ apoyada por la debilidad del dólar en el mercado internacional, debido a la expectativa de que los aumentos esperados en el costo del dinero serán graduales y a reportes de la actividad industrial menor a lo esperado publicados en Estados Unidos.

El índice que mide el comportamiento del dólar frente a una canasta de seis divisas pierde 0.20 por ciento.

El pasado viernes la presidenta de la Fed, Janet Yellen, reforzó la política de aplicar aumentos en tasas de una forma gradual, lo cual no favorece al dólar.

Un indicador de la actividad manufacturera dado a conocer por la Fed de Nueva York se reportó en -6.8 puntos muy por debajo del 1.0 estimado, de acuerdo con una encuesta levantada por Blommberg.

El índice de la producción industrial mostró un crecimiento de 0.1 por ciento en el pasado septiembre, en línea con lo estimado en promedio por el mercado. En tanto que la cifra de agosto fue revisada a la baja, al pasar de -0.4 a -0.5 por ciento.

La utilización de la capacidad instalada en Estados Unidos fue de 75.4 por ciento en el noveno mes del 2016, menor al 75.6 esperado de acuerdo a una encuesta de Bloomberg.

Un débil desempeño de la actividad industrial en Estados Unidos no favorece la existencia de un dólar fuerte, debido a que le resta competitividad a la parte relacionada con su sector exportador.

En el caso de México, el peso se ve favorecido por el momento por un billete verde que retrocede en parte por un débil desempeño de la actividad industrial. No obstante, este comportamiento no es una buena noticia para la actividad manufacturera en México, lo cual puede limitar también el potencial de apreciación de la moneda mexicana.