- Exigen empresarios al alcalde Darwin Eslava que se preocupe más por lo que fue electo y deje la reelección
Grupo Puntual / Esperanza Moreno
COACALCO, México, 25 de Octubre de 2020.- Más ocupado en sus aspiraciones de reelegirse en el cargo, el presidente municipal de Coacalco, Darwin Eslava Gamiño tiene hundido a su municipio en la inseguridad. De acuerdo con la Encuesta Nacional de Percepción de la Inseguridad, realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), Coacalco, junto con Ecatepec, se ubica en el “top teen” de la inseguridad pública.
Coacalco enfrenta “focos rojos” en el Semáforo Delictivo Nacional en materia de extorsión, delitos contra la salud, robo en todas sus formas, violencia sexual, daño en los bienes y violencia intrafamiliar, sin que la administración municipal tenga una estrategia clara en contra del delito.
El empresario de la construcción Benjamín Alfaro afirmó que Coacalco es uno de los municipios más peligrosos del Estado de México, ya que presenta altos índices en delitos como robo de autos, a casa habitación, transeúntes y a negocios.
Alfaro exhortó al presidente municipal de Coacalco, Darwin Eslava Gamiño, a que se preocupe más para lo que fue electo. “Que nos brinde seguridad y servicios públicos dignos a los coacalquenses”, exigió.
Señaló que existe una sospechosa relación entre la operación de grupos delictivos y la “relajada política de seguridad del presidente municipal de Coacalco”.
Todos los negocios de Coacalco somos sujeto de extorsión todos los días, y aunque denunciamos y reportamos los hechos a la policía municipal, simplemente no pasa nada, parece como que los propios policías son los que protegen a esas bandas de delincuentes, añadió Alfaro.
Otro de los delitos que va alza en Coacalco es la desaparición de personas, principalmente mujeres jóvenes. Uno de los caos más sonados en los últimos meses fue el de Esmeralda Citlalli Mendoza Ordaz, una adolescente de 16 años de edad, quien desapareció presuntamente en un crucero de Coacalco cuando realizaba actos circenses con su padre para ganarse unas monedas.
Se presume que la jovencita fue “levantada” por una banda de tratantes de mujeres vinculadas con prostitución que opera libremente al amparo de un gobierno tibio y distraído en cuestiones electorales y totalmente apartado de su obligación de brindar seguridad a los ciudadanos.