Un hombre de origen mexicano identificado como Severiano Martínez Rojas, alias “Negro” o “Gato”, se declaró culpable ante una corte federal estadounidense de participar en una red de tráfico sexual en Georgia.

“Los acusados se aprovecharon de la situación de vulnerabilidad de las tres mujeres jóvenes a quienes les infundieron miedo y les obligaron a prostituirse con extraños para obtener un lucro con ello”, relató el secretario Interino de Justicia Auxiliar de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia de Estados Unidos, Tom Wheeler.

Los acusados operaban el negocio de bajo costo que requería que las mujeres sostuvieran relaciones sexuales con hasta 20 hombres por noche. La red en la que participaban se dedicaba a la trata de personas condiciones de explotación sexual, de mujeres originarias de México y Guatemala.

Martínez Rojas es el cuarto mexicano acusado del tráfico sexual de tres mujeres que fueron introducidas ilegalmente a territorio estadounidense con destino a Atlanta.