En México nacen más de dos millones de bebés al año, de estos, el 7% son infantes prematuros. Estos nacimientos se vinculan con diversos factores, pero en mayor medida con el embarazo adolescente y la obesidad, situaciones que se han incrementado en los últimos cinco años, afirmó Luis Paulino Islas Domínguez, jefe del Servicio de Pediatría del Hospital General de México Eduardo Liceaga (HGM).

Islas Domínguez informó que este problema también se asocia a enfermedades crónico degenerativas que padece la madre; como diabetes, hipertensión, cardiopatías y nefropatías, por lo que las embarazadas que viven con alguna de ellas deben tener cuidados especializados desde la concepción, así como un excelente control prenatal para disminuir el riesgo sufrir un parto adelantado.

El nacimiento prematuro, dijo, pone en riesgo la vida del recién nacido, ya que su desarrollo no se completó durante la gestación y existe inmadurez cerebral, del sistema cardiaco, digestivo y endócrino, así como del respiratorio, este último es el más común y la principal causa del fallecimiento de estos pacientes.

El HGM, enfatizó el especialista, cuenta con equipo de profesionales médicos para el manejo y control de estos pacientes, además de la tecnología e insumos necesarios para tratar a estos pequeños en el Servicio de Gineco-Obstetricia.

El secretario de salud, José Narro Robles, mencionó en noviembre pasado que a través del Seguro Popular se destinarán 150 millones de pesos para equipamiento médico en las diferentes unidades hospitalarias del país.