El senador Patricio Martínez (PRI) se reunió ayer con el presidente de su partido, Enrique Ochoa Reza, ante quien ratificó su inconformidad con la decisión del gobierno de incrementar la gasolina y diesel a lo largo del territorio nacional.

El legislador, quien el pasado 2 de enero envió una carta a su líder nacional en la que rechaza el gasolinazo y exige al CEN del tricolor dejar de apoyar la medida, aseguró que habló con Ochoa Reza con claridad sobre este tema.

Martínez rechazó que haya una revolución o rebelión al interior de su partido contra su dirigencia nacional y que su posición se trata de la libertad con la que ha actuado dentro del PRI a lo largo de más de 20 años de vida partidista.

Afirmó que para este tema se requiere impulsar acciones y no sólo una protesta.

Tras el encuentro con Ochoa reza, el legislador negó que haya algún tipo de división en el PRI y dijo que se ha demostrado apertura y capacidad de diálogo e intercambio de ideas en favor de México.
Martínez insistió en que cuando envió su carta el 2 de enero al dirigente nacional del PRI no realizó nada diferente a lo que ha hecho en el transcurso de su carrera en la política a lo largo de más de 20 años:

Detalló que acordó con Ochoa Reza que en los próximos días trabajarán en la posibilidad de ejecución real de su propuesta de una eventual importación de gasolinas de refinerías texanas para el estado de Chihuahua, lo que podría replicarse en otras entidades como Coahuila y Tamaulipas.